La diabetes es una enfermedad a veces comprendida y a veces no, la mayoría. Por desconocimiento, desinterés, miedo, pereza, lejanía, infinidad de motivos, como ocurre con todas las cosas.
Lo que pasa es que cuando te toca a ti, todo cambia. Es una alteración del sistema metabólico, que para bien o para mal, te cambia la vida. Todo depende de la actitud con la que la afrontes, las circunstancias que te rodeen y los daños colaterales que conlleve. Esto es genérico también para cualquier cosa en la vida.
Lo que sí está claro, es que el ser diabético incluye muchas veces un sentimiento de soledad, difícilmente describible que sólo lo entiende otro diabético.
Te sientes solo cuando te da una hipoglucemia y devoras cualquier comida ante la mirada atónica de los que te rodean; cuando tienes una hiper y te sientes tan enojado con el mundo que gritarías a cualquiera que pasar por tu lado; cuando tienes que comer a tus horas y ves que por el motivo que sea no puedes hacerlo; cuando tu cabeza no puede dejar de contar hidratos y unidades de insulina; cuando te sientes vulnerable porque has hecho ejercicio y sientes que te flaquean las fuerzas y puedes estar sufriendo una hipoglucemia. En definitiva, son mucha las situaciones que pueden hacer sentirte mal y diferente.
La diabetes requiere disciplina, voluntad, constancia, optimismo, tesón, esperanza, lucha y toda una serie de valores, nada cotizables en nuestra sociedad pero imprescindibles para convivir con nuestra amiga. Porque está claro que la diabetes o la tienes de amiga o de enemiga te puede puede hacer mucha pupa, a nivel físico y psicológico.
Por ello, considero imprescindible que junto a endocrinos, enfermeros, cuidadores, y demás personal sanitario, el diabético pudiera contar en su equipo médico con un psicólogo, para esos momentos de soledad, inseguridad, frustración, miedo que siente muchas veces en su camino. Porque esta es una batalla dura y sobre todo, larga. No obstante, con optimismo y valentía siempre salimos adelante. Pues, nos va la vida en ello.
Sigue adelante. Saludos desde Palma del Rio (Cordoba)
ResponderEliminarMuchas gracias Miguel. He visto tb tu blog y me encantan las excursiones y fotos que tienes, geniales. A mi me gusta mucho el senderismo y para el azúcar va genial.
EliminarUn saludo y gracias por tu comentario.
Yo aprendí conviviendo con la diabetes de mi hijo, que la diabetes puede ser también una razón para aprender, para motivarte y para enorgullecerse, pues, cuando aprendes a entender todo lo que pasa eres capaz de convertir todo lo que te hace sentir mal en logros y poco a poco podrás comer entre horas durante las fiestas y reuniones, comer cosas que antes estaban prohibidas, y llevar una vida más libre, donde tú decides y controlas tu diabetes sin tener hiperglucemias por ello. Hay que ponerse y no es fácil, pero te hará sentir bien, ya lo verás. Un abrazo y suerte.
ResponderEliminarMuchas gracias Sergio, eres todo un ejemplo para muchos padres. Me ayudan tus palabras más de lo que crees. Por cierto muy bueno tu blog. Un saludo y estamos en contacto por la blogesfera.
EliminarGenial, Rosario.
ResponderEliminarMuchas gracias Fernando, por leerme y por tu comentario. Un saludo!
EliminarRosario... Qué te voy a decir? Sabes que me tienes ahí, para leerte en esos días que mandamos todo a tomar por culo... Que te comprendo... Que te animo a que sigas luchando, porque la diabetes, no merece que derramemos una lágrima... Lucha! Quizás mi vida, me ha enseñado que es una lucha diaria, o porque he tenido que madurar a base de ostias... En el 2001 a mi madre le dio un ictus cerebral, dejándola con una hemiplejia izquierda, es dependiente en todo, necesita ayuda en todo... Y en el 2009, mi padre tuvo un accidente practicando su pasión, la bici... dejándolo tetrapléjico y cuando conseguimos sentarle en una silla, se me muere... Qué decirte? Que lucho como una jabata desde los 21 años y que la diabetes no puede conmigo... Puede que tenga un día triste, pero no puede conmigo... Soy muy cabezona, cabeza cuadrada con ella... Aunque con esto, te digo, que de vez en cuando me tomo mi hamburguesa o pizza y algo de dulce... En resumen, que me tienes ahí para lo que quieras, y lucha!! Ánimo!!
ResponderEliminarNagore, me gusta mucho leerte y me transmites una gran fuerza cada vez que te leo. Saber tu historia aún da más idea de la valía que tienes. Por supuesto, que la diabetes será pecata minuta para ti con estas adversidades. Yo también te digo que estoy aquí para ayudarte en lo que pueda. Hay que disfrutar el día a día y hacerlo lo mejor que podamos.
EliminarUn fuerte abrazo y estamos en contacto!!
Rosario, enhorabuena, por tu blog, estaremos por aqui también.
ResponderEliminarElena
Muchas gracias Elena por leerme. Un abrazo!
ResponderEliminarHace poco que le diagnosticaron diabetes infantil a mi hijo pequeño. Siempre me han dado bastante cosa las agujas... está siendo todo un reto esto de aprender a administrarle insulina, hacer el control de los niveles de azucar... bff no os podeis imaginar!!! Estos días he estado leyendo esta guía: Tengo Diabetes pero agradeceria que me recomendarais mas libros o manuales para "principiantes". muchas gracias.
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